Señor Director:
En su artículo editorial del pasado martes 7 de diciembre, titulado ‘Reactivación de plantas termoeléctricas’, se realiza un recuento de los principales elementos que están presentes en la situación actual de nuestra matriz eléctrica, en particular en la estrechez que se ha configurado este año y su evolución durante 2022.
Compartimos el sentido de urgencia que se debe imprimir en las gestiones y acciones que nos permitan enfrentar la sequía que nos acompaña, así como las que puedan venir en adelante, producto de la crisis climática que afecta al planeta. Sin embargo, se requieren diagnósticos amplios, que den cuenta de soluciones probadas y confiables, como es el mayor aprovechamiento de la infraestructura de gas natural existente desde hace varias décadas en Chile. El artículo editorial, al omitir al gas natural en su análisis, termina presentando un abanico incompleto de las alternativas existentes.
El gas natural —energético llamado a jugar un rol clave en la transición hacia una matriz descarbonizada, según lo señalan expertos y organismos internacionales— permite romper una falsa dicotomía entre la generación diésel y el desarrollo de tecnologías de almacenamiento, la que se ve aún lejana para enfrentar la estrechez de nuestro sistema eléctrico. La experiencia internacional demuestra que las transiciones energéticas no están exentas de dolores; sin embargo, un común denominador en la mayoría de ellas es la presencia y rol del gas natural, como insumo que aporta generación de base, con seguridad, flexibilidad y bajas emisiones.
Carlos Cortés Simon, Presidente Ejecutivo AGN