El presidente ejecutivo de AGN, Carlos Cortés, dice que esperan un pronto cierre de contratos de gas argentino para octubre 2022-abril 2023, siguiendo el esquema implementado en el último periodo estival, además del inicio de negociaciones para el invierno 2023. “Contar con gas natural todo el año es clave para el desarrollo del país, ya sea argentino o GNL”. El ejecutivo afirma que la logística del gas natural debe ser potenciada, dado el rol que le cabe en la transición energética.
—Las posibilidades ciertas de seguir contando congas natural argentino a firme todo el año entusiasman a las empresas del rubro y a las autoridades que participaron en la gira presidencial a ese país esta semana. Argentina anunció no solo que mantendrá el suministro ininterrumpido en el próximo período estival (octubre de 2022 a abril de 2023), tal como hizo en el actual, sino que también podrían exportara firme en el invierno de 2023. Para el invierno de este año entregarían del orden de 300.000 m3/día por el Gasoducto del Pacífico, lo que aliviaría a las industrias de la zona de Concepción, a lo que podrían sumarse algunas ventas de oportunidad.
¿Cómo se llegó a abrir por primera vez desde mediados de los 2000 la compuerta para, eventualmente, recibir gas argentino los 365 días del año? Primero, porque el fracking instaló a ese país en el número dos del ranking de reservas de gas natural no convencional en el mundo, lo que le asegura un horizonte de producción de largo plazo. Y segundo, porque el Plan Gas.Arg, lanzado en noviembre de 2020 por el gobierno de Alberto Fernández para bombear 30.000 millones de m3 de gas natural en cuatro años, generó una oferta que permitió autorizar permisos de exportación a productores excedentarios a un precio superior al local. Por ello se cerraron contratos a firme con empresas chilenas por unos 10 millones de m3 diarios desde octubre de 2021 hasta el próximo 30 de abril, lo que permitió mantener la producción incrementa) de la cuenca de Vaca Muerta durante el período de baja estacional de la demanda interna y ante la limitación de transporte de los gasoductos locales. Ese gas vino mayoritariamente a aliviar los requerimientos de generación eléctrica en el centro del país.
En la comitiva de Gabriel Boric a Argentina viajó también Carlos Cortés, presidente ejecutivo de la Asociación de Empresas de Gas Natural (AGN). “Hay buenas noticias respecto de los avances del Plan Gas.Ar. Estamos convencidos de que la integración energética es un eje fundamental para contar con mayores niveles de seguridad energética, que nos permitan avanzar en las metas de reducción de emisiones. En esa línea, la declaración conjunta emitida por las autoridades de ambos países va en la dirección correcta.
Pero incluso fueron más allá: coincidieron en la importancia de trabajar colaborativamente para incrementar las exportaciones e importaciones entre ambos países y destacaron la voluntad de establecer a la brevedad los contratos correspondientes a la temporada estival 2022-2023, junto con impulsar contratos por más gas natural en el mercado bilateral para los próximos años, contemplando exportaciones a firme los 365 días del año”, resume el ejecutivo a Pulso.
A juicio de Cortés, esto evidencia un mutuo convencimiento sobre la importancia del gas natural para una transición energética segura. “Nuestro país ya tiene la ventaja de contar con un suministro garantizado de gas natural a través de las importaciones de GNL por los terminales de Quintero y Mejillones, respaldadas por contratos de largo plazo”.
Con el precedente de los contratos argentinos a firme del último verano se anticipa que mantendrán su competitividad en materia de precios. “Si bien el precio es fundamental, la garantía de contar con gas natural todo el año es clave para el funcionamiento y desarrollo del país, ya sea argentino o GNL”, afirma Cortés. Agrega que: “La complementariedad entre GNL y gas natural argentino es muy virtuosa. Chile obtiene GNL desde múltiples orígenes, lo que además de otorgar seguridad de suministro a largo plazo permite lograr contratos competitivos”. El ejecutivo enfatiza que los precios del gas son “sumamente competitivos” y que hay voluntad tanto de las autoridades como de los productores transandinos por incrementar su presencia en Chile.
La industria local espera además que los contratos futuros de abastecimiento puedan ser incluso mayores. “En virtud de lo acordado entre las autoridades, esperamos un pronto cierre de acuerdos no sólo para el suministro en los meses de verano, sino incluso durante todo el año. Creemos que durante este primer semestre Chile puede incrementar su aprovisionamiento de gas argentino para los próximos años y así reforzar el rol crucial que ya tiene el gas natural en nuestra matriz”.
TRANSICIÓN ENERGÉTICA
Carlos Cortés destaca que la infraestructura de GNL ha exhibido una “impecable disponibilidad” y que “la logística de gas natural y GNL debe ser potenciada, entendiendo el rol que juega en la transición energética global”.
En cuanto a la posibilidad del gas para competir con diésel en la cobertura de la salida de carboneras y eventuales déficits de generación eléctrica, en un escenario de hidrología crítica, el presidente ejecutivo de AGN plantea que si con la salida de las carboneras se busca reducir emisiones, sería paradójico que se sustituyeran con diésel, que en algunos parámetros es incluso más contaminante que el carbón. “Los atributos del GN son evidentes en relación con otros hidrocarburos”. Agrega que en términos de precios comparados, “los contratos de GNL son a largo plazo y competitivos con el diésel, e incluso más baratos si revisamos valores históricos. La infraestructura de GNL y gas natural con la que cuenta Chile debe ser aprovechada al máximo para enfrentar con criterios de seguridad los desafíos que imponen la crisis hídrica, la variabilidad de la generación renovable y la logística del diésel”.
A su juicio, una mayor disponibilidad de gas natural, “en un escenario donde complementamos GNL con gas natural argentino, contribuye a tener una matriz diversificada para enfrentar una transición con criterios de seguridad de suministro”.
Fuente: La Tercera